Una de las grandes ventajas consiste en analizar un determinado volumen adquirido de la anatomía fetal en diferentes planos y en distintos sectores de su anatomía. Otra ventaja es la obtención de imágenes claras que permitan la comprensión mas sencilla de cualquier anomalía sobre todo las superficiales y por último el impacto emocional que genera estas imágenes en los padres sobre todo las de tiempo real (4D) que permite demostrar sorprendentes actitudes del feto (apertura de la boca, bostezo, sonrisas, gesticulaciones, potrusión de la lengua, movimientos de las extremidades).
Tiene sus limitaciones como la ecografía bidimensional : cuando hay escasa cantidad de líquido amniótico, movimientos fetales exagerados, obesidad materna, posición fetal inadecuada (si el feto nos da la espalda imposibilita ver la cara).
¿Cuando realizar el estudio? El mejor momento es aquel en el cual mejor se puede observar al feto: sobre todo donde la cara ya cuenta con un panículo adiposo suficiente, los miembros superiores e inferiores ya demarquen su fisonomía y el feto gesticule con mayor frecuencia.
Esta combinación de factores se logra mejor al final del segundo trimestre y en los comienzos del tercero (28 – 32 semanas).
Es muy importante aclarar que la U3D no remplaza a la ecografía convencional (bidimensional), en más bien su aliado porque permite mejorar las imágenes que ayudan en ocasiones a confirmar el diagnóstico, por lo tanto la indicación para realizar Ecografía 3D y 4D surge de un estudio ecográfico convencional previo.
El método debe ser realizado por manos entrenadas y por médicos familiarizados en la evaluación de la anatomía fetal y sus malformaciones.
El uso de la ecografía tridimensional para estudios ecográficos ginecológicos también es de suma utilidad sobre todo en el estudio de la pared uterina (miomas etc.) , cavidad endometrial (pólipos, etc) y ovarios (quistes , tumores sólidos etc).